Ford está explorando posibles colaboraciones con Nissan, lo que generó especulaciones sobre un SUV Maverick revivido. Esta medida sigue al reciente compromiso de Ford con los automóviles de pasajeros en Europa a través de una asociación con Renault, y informes no confirmados sugieren conversaciones con Nissan sobre plataformas compartidas para América del Norte. La idea no es nueva; Ford y Nissan colaboraron anteriormente en la década de 1990, en particular con el Ford Maverick original, esencialmente un Nissan Patrol rebautizado.
Un legado de rebautismo
La historia del Maverick original tiene sus raíces en la fabricación compartida entre Ford Australia y Nissan Australia. A finales de la década de 1980, una asociación de 100 millones de dólares dio lugar a varios modelos compartidos, incluido el Nissan Pintara vendido como Ford y un Ford Falcon ute comercializado bajo la marca Nissan. El resultado más notable fue el Ford Maverick, un cambio de nombre directo del Nissan Patrol. Al mismo tiempo, en algunos mercados, el nombre Maverick se aplicó al Nissan Terrano II.
Esta práctica de cambiar el nombre no era meramente cosmética; permitió a ambas empresas ampliar sus líneas con costos de desarrollo mínimos. Sin embargo, también planteó dudas sobre la identidad de la marca y la percepción del cliente. ¿Por qué conformarse con un modelo renombrado cuando los consumidores pueden comprar directamente el original?
El nuevo Maverick: un concepto digital
Mientras Nissan planea el lanzamiento del Patrol de próxima generación en 2026, el artista digital Theottle ha creado una representación de un posible nuevo Ford Maverick basado en los diseños actuales de los SUV de Ford. Este concepto ilustra cómo podría ser una colaboración futura, combinando la robusta plataforma de Nissan con la estética de Ford.
La competencia y las opciones de motor
La idea gana fuerza debido al deseo de Ford de competir con el Toyota LandCruiser Serie 300 en el mercado australiano. El nuevo Patrol contará con un motor V6 biturbo de 3,5 litros que producirá 317 kW y 700 Nm; casualmente, el mismo motor que se encuentra en la Ford Expedition. Esto contrasta marcadamente con el Maverick original, que ofrecía opciones de seis cilindros y 4,2 litros de baja potencia (125 kW de gasolina, 85 kW de diésel) sin turbocompresor.
¿Sucederá?
Si bien no hay una asociación confirmada, Ford probablemente recibiría con agrado un producto competitivo para desafiar a Toyota. Sin embargo, la insignia Maverick fue revivida recientemente para una camioneta del mercado estadounidense en 2021, lo que hace menos probable un regreso al segmento de SUV con el mismo nombre. La conclusión clave es que la historia de Ford con Nissan, combinada con las demandas del mercado, hace que un nuevo SUV Maverick sea un resultado plausible, aunque no garantizado.
En última instancia, el éxito de una empresa de este tipo depende de que Ford y Nissan encuentren beneficios mutuos al compartir plataformas y marcas. La pregunta sigue siendo: ¿la nostalgia y la presión competitiva superarán las consideraciones de marca?




























