El superdeportivo de los años 90 que superó a Ferrari por menos

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Durante décadas, Ferrari ha sido sinónimo de lujo de alto rendimiento, pero en la década de 1990 surgió un desafío sorprendente: el Acura NSX. Este superdeportivo diseñado por Honda no sólo competía con los Ferrari: a menudo los superaba y por una fracción del precio. El NSX demostró que una ingeniería excepcional no requiere un precio exorbitante.

El estándar Ferrari: el 348

El Ferrari 348 de finales de la década de 1980 fue un vehículo emblemático para el fabricante de automóviles italiano. Su motor V8 de 3.4 litros producía 300 caballos de fuerza, lo que le permitía acelerar a 60 mph en 5.6 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 171 mph. El diseño, escrito por Pininfarina, presentaba las líneas nítidas y las tracas laterales características de los Ferrari de la época. El 348 representó un salto adelante en la construcción del chasis y la aerodinámica, pero en ese momento tenía un precio de alrededor de 140.000 dólares.

Ingrese el Acura NSX: el experimento de superdeportivo de Honda

El NSX de Honda, lanzado en 1990, fue diseñado con un objetivo singular: vencer al Ferrari 348 en la pista. El nombre del vehículo, “New Sports car eXperimental”, refleja su enfoque innovador. A pesar de tener menos potencia (un V6 de 3.0 litros que produce 270 caballos de fuerza), el NSX ofrecía una experiencia de conducción que a menudo superaba a la Ferrari. La diferencia clave no fue la velocidad bruta, sino el equilibrio, el manejo y la confianza del conductor.

Rendimiento y manejo: la ventaja de NSX

Mientras que el Ferrari tenía más caballos de fuerza en el papel, el NSX se sentía más firme en las curvas. La construcción de aluminio del NSX lo mantuvo liviano, mientras que su suspensión de doble horquilla y su distribución de peso cercana al 50:50 brindaron una dirección precisa. Esto hizo que fuera más predecible y más fácil conducir al límite, algo con lo que Ferrari tuvo problemas. El NSX no sólo fue rápido; era accesible.

Precio y confiabilidad: la fórmula ganadora del NSX

El NSX superó al Ferrari por un margen significativo: alrededor de 65.000 dólares frente a 140.000 dólares. Esa diferencia de precios lo convirtió en una opción viable para los entusiastas que anhelaban el rendimiento de un superdeportivo sin el compromiso de seis cifras. Pero el NSX no sólo era más barato; También era más confiable. Construido con la meticulosa ingeniería de Honda, el NSX era conocido por su durabilidad. Hoy en día, muchos NSX de primera generación tienen más de 100 000 millas, un testimonio de su calidad de construcción. El Ferrari 348, por el contrario, requería un mantenimiento frecuente y costoso.

Mercado actual: el aumento de valor del NSX

Hoy en día, ambos coches son buscados por los coleccionistas. Un NSX de primera generación en buen estado puede venderse entre 60.000 y 120.000 dólares, mientras que el Ferrari 348 oscila entre 80.000 y 90.000 dólares. Sorprendentemente, el NSX suele tener un precio más alto ahora, a pesar de ser significativamente más barato cuando es nuevo. Esto refleja su creciente reputación como una maravilla de la ingeniería y una verdadera alternativa al superdeportivo italiano.

El Acura NSX demostró que Ferrari no era intocable. Al priorizar el manejo, la confiabilidad y el valor, Honda creó un superdeportivo que podía vencer al caballo rampante en su propio juego. El NSX sigue siendo un recordatorio de que un rendimiento excepcional no siempre requiere un precio astronómico.